Este finde me embarque en la exploración de uno de los lugares más atractivo de mi nuevo hogar Álava: el Salto del Nervión, el colosal salto de agua más grande de la Península Ibérica, con una caída libre de 270 metros.
Una de las maravillas de este lugar es su naturaleza caprichosa: nace en terrenos kársticos, lo que significa que no siempre fluye agua. Esta joya se muestra en todo su esplendor tras fuertes lluvias o durante el deshielo, cuando las aguas subterráneas se desbordan a la superficie. En otros momentos del año, el sistema kárstico alimenta las corrientes que fluyen en el valle, cerca de la encantadora localidad de Orduña.
Crónica:
El reloj marca las 9:00 a.m. cuando llegamos a Delika. La frescura del día se evidencia no solo por los -4º que registra el termómetro del coche, sino también por el paisaje teñido de blanco. Antes de emprender la travesía, nos abrigamos con plumas, guantes y gorro. Así, dar los primeros pasos parece una invitación más que un desafío.
El inicio de la ruta es algo potente. En los primeros dos kilómetros, superamos más de 300 metros de altitud por una pista algo deteriorada pero lo suficientemente transitable. Esta senda serpentea a través del bosque y mientras ascendemos hacia el portillo de Bagete, vislumbramos al fondo la majestuosa cascada. La alegría nos embarga al ver el agua fluyendo con fuerza.
Al alcanzar el kilómetro 2.5, llegamos al portillo de Bagate. Aquí abandonamos la pista para adentrarnos sin sendero definido hacia las vallas de protección que resguardan a los animales de los acantilados de la sierra. Nuestro objetivo es la cima de Bagate, a 724 metros de altura (km 2.9). Las vistas desde este punto son impresionantes, abarcando el cañón, el macizo del Gorbea y el valle de Orduña.
Continuamos siguiendo el curso de las vallas, atravesando un extenso prado donde pastan caballos. A pesar del frío persistente, parece que el día nos regala cielos despejados, lo más importante para disfrutar plenamente del entorno.
Al llegar al kilómetro 5, alcanzamos la segunda cima del día: Bertzeta, a 823 metros. Desde aquí, nos acercamos aún más al Salto del Nervión. Su imponente presencia nos cautiva, y admiramos cómo entre las paredes del cañón emergen otras cascadas alimentadas por el flujo de agua.
Continuamos bordeando el cañón hasta llegar al Río Nervión, que cruzamos fácilmente gracias a las piedras dispuestas estratégicamente. Superamos un pequeño repecho que nos lleva al mirador. Es aquí donde nos topamos con los primeros humanos en toda la ruta. Hasta este punto, habíamos estado solos, pero ahora, aquí, es momento de turnarse para la inevitable fotografía.
No nos demoramos mucho en este lado del cañón, ya que el viento azota con fuerza y la sensación térmica es más baja. Además, el hambre comienza a apremiarnos y anhelamos un lugar resguardado para detenernos y disfrutar de un merecido descanso para comer. A partir del mirador, nos adentramos en la senda PR-BU-45 «Senda del Cortado». Como su nombre indica, esta ruta serpentea por los acantilados, permitiéndonos contemplar los típicos relieves del Monte de Santiago y la Sierra Salvada. Sin embargo, varios carteles nos advierten sobre los peligros de desviarnos del sendero hacia los cortados, así que extremamos la precaución.
Siguiendo esta senda, llegamos al mirador «Esquina Rubén», junto a la cima de Arando a 944 metros (km 10.6). El viento sigue siendo implacable, sin darnos tregua alguna. ¡Qué cambio tan drástico entre vertientes!
Desde aquí, nuestro camino se transforma en la PR-BU-46 «Puerto de Orduña», que finaliza en la carretera (km 12.6). Caminamos unos 300 metros por la carretera hasta llegar al mirador «Puerto de Orduña». Aquí, debemos «saltar» el muro, ya que el sendero continúa por la parte trasera. El terreno se torna más empinado a partir de este punto, con un descenso de 300 metros en tan solo 1.5 km. Nos orientamos gracias a las flechas azules y las marcas rojas en las rocas y árboles. Alrededor del kilómetro 15, tomamos el sendero que se despliega a la derecha, llevándonos hacia la pequeña localidad de Zamarro. Un kilómetro más adelante, nos encontramos nuevamente en Delika, completando así nuestro recorrido.
Ruta en Wikiloc: https://es.wikiloc.com/rutas-senderismo/salto-del-nervion-156238515
Más fotos en: https://www.facebook.com/media/set/?vanity=100063578737042&set=a.859333956195888&locale=es_ES
Mucho más que montañas 